Déjenme decirles que me emociona contarles esta experiencia. Este ha sido el tour que más he disfrutado. Para que sepan, Omega Tours hace un trabajo fenomenal, no solo con sus guías, sino que también con su equipo y su genial eco lodge.
Le pedí a un amigable conductor de taxi, Don Melvin, que me llevará a la Cuenca del Río Cangrejal. El me dejo en el Lodge de Silvia y Udo aproximadamente una hora antes de comenzar el tour. Decidí entonces tomar un libro, escoger una hamaca y leer mientras escuchaba la lluvia caer. Sí, se sintió así de bien como se lo imaginan.
A eso del mediodía, nos sirvieron un gran plato de espagueti y pan fresco. Fue muy agradable compartir el almuerzo (que se incluye en el precio del tour) con las personas que iba a hacer rafting; incluyendo a los instructores. Nos aprendimos nuestros nombres, de donde veníamos y cuales eran nuestros planes de viaje. Luego tome una pausa para cambiarme y prepárame para mi primera experiencia de rafting. Darwin y George, nuestros guías, nos colocaron el chaleco salvavidas y cascos y luego nos dirigieron por un sendero que conduce al río. Solo un consejo para los que están interesados en realizar este tour, no tienen que ser expertos, pero si deben tener la habilidad para caminar por unas piedras resbalosas. Fue desafiante, pero al final valió la pena.
Los chicos nos llevaron río arriba, para mostrarnos como nadar contra la corriente y luego ir a saltar desde unas enormes piedras. Aunque los que me conocen saben que soy gallina, estoy orgullosa de decirles que salte desde todas las piedras y grite como loca mientras lo hacía.
Una vez que llegamos el punto deseado, Darwin nos dijo que flotáramos boca arriba y dejáramos que la corriente nos llevara donde iniciamos. Me encantó sentir la fuerza del río y simplemente acostarme y admirar la naturaleza. Parecía que estaba en un mundo diferente con esas piedras gigantescas.
En unos minutos nos llevaron a nuestra locación inicial donde tomamos agua (ellos la llevan junto con una bolsa impermeable para almacenar las cámaras y otro equipo) y abordamos nuestra balsa. Después de una sesión introductoria y la información de seguridad, ¡comenzamos! En mi balsa iba al frente una chica guatemalteca, que hacía rafting por primera vez y que estaba trabajando en Omega, yo en medio, y Darwin atrás haciendo casi todo el trabajo. Él gritaba “remen al frente”, “remen para atrás” o “paren” mientras la balsa daba vueltas siguiendo el ritmo del Cangrejal. Pasamos por diferentes rápidos en lo que ha sido quizás la hora y media más loca que he tenido en mucho tiempo. Una vez terminado, escalamos hasta llegar a un jeep que nos esperaba para regresar a Omega. Llegamos al bar justo a tiempo para el “happy hour” (cervezas nacionales al 2×1 para su información), platicamos un poco hasta que finalmente regresamos a nuestros destinos, sonrientes y cansados.
Si estás interesado en este tour, contacta a Omega Tours al correo omegatours@gmail.com o jungle@omegatours.info y no olvides consultar las opciones de alojamiento.