Hay muchos destinos que ofrecen tours nocturnos en la naturaleza. En Atlantida, puedes disfrutar de esta experiencia en el tour nocturno en Punta Izopo. En la naturaleza, hay fauna que es nocturna, y, por lo tanto, nunca la vera durante el día. Por ello, lo idóneo para ver la fauna nocturna de un área protegida es realizar un tour por la noche. Puedes disfrutar de esta experiencia en el parque Nacional Punta Izopo, que es una de las áreas protegidas de Tela. El Tour lo ofrece Garifuna Tours, una de las tour operadoras de Tela que cuenta con el Distintivo de Calidad Atlantida Turística.
El punto de partida es en las oficinas de Garifuna Tours, que están a un lado del Rio Lancetilla en Tela. La hora de salida es a las 4 la tarde, y es que lo mejor para este tour es llegar aun con luz del día. Así puedes ver la fauna diurna antes del anochecer, gozar de un bello atardecer y finalmente observar la vida nocturna del Parque Nacional. Sin duda se trata de una aventura interactiva, en donde el protagonista es uno mismo, ya que es necesario remar su propio bote en la laguna y canales de manglar. El bote es un kayak abierto, y puedes escoger entre uno para dos personas o bien uno unipersonal. Si no se siente seguro remando solo, puede pedirle al guía que lo acompañe en su bote. De esta manera, él le ayudara guiando el bote y maniobrando entre los canales.
Una de muchas aves que observamos durante nuestro tour en Punta Izopo. Foto Cortesía Garifuna Tours
Comenzamos nuestra aventura del tour nocturno en Punta Izopo aun con luz del día. Antes del anochecer, la posibilidad de ver monos es muy buena. En mi caso, tuve oportunidad de ver monos aulladores. Estos pasan en las copas del bosque de manglar que rodea a la laguna de este humedal. En su intento por asustarnos, aullaban ferozmente, lo cual nos motivaba a adentrarnos mas en el canal para poder observarlos de cerca. No soy avisturista, pero lo cierto es que vimos una variedad de aves marinas que habitan en este parque. Por ser aun invierno en el norte, resulta que hay muchas aves migratorias que viajaron hasta estas latitudes. Lo cierto es que muchas no tardan en emprender su viaje de retorno ahora que viene la primavera y el verano.
Un cocodrilo descansa sobre un tronco en el Parque Nacional Punta Izopo
Al ponerse el sol, el ambiente cambia dramáticamente. Yo he tenido la suerte de que me toco hacer el tour en estos días, y tenemos una luna casi llena. Así, la oscuridad no fue total, y algunos rayos de luna se alcanzaban a filtrar bajo el bosque de manglar. Sin duda, el ambiente era distinto, podría decir que incluso, un poco tenebroso. Uno de los instrumentos para disfrutar de este tour es una linterna. Esta sirve para ayudarnos a ver el animal mas grande de los pantanos en los que estamos navegando. Se trata, por supuesto, de los cocodrilos. Estos pueden alcanzar a tener hasta 4 metros de longitud, pero los que hemos visto han sido de apenas unos 2 o 2 1/2 metros los más grandes. Ellos suelen estar en las playas o bien en troncos sobre el agua y permanecen muy quietos.
El asunto es que, al navegar entre los canales, y utilizar nuestras linternas para buscar a los cocodrilos, ¡veíamos de repente la luz reflejada en sus ojos! Que nervios darnos cuenta de que estaban tan cerca y que no los podíamos ver. El silencio era total, y solo se escuchaba el agua que movían nuestros remos al propulsarnos lentamente por los canales. Ya los monos se habían ido a dormir, y las aves estaban en total silencio. Los cocodrilos, siempre sigilosos, solo nos miraban y sentíamos su mirada penetrante, aunque nosotros no los viéramos a todos. Los murciélagos, que también son nocturnos, revoloteaban entre los canales, mientras volaban hábilmente en busca de insectos para alimentarse. ¡Realmente, la experiencia de este tour nocturno en Punta Izopo es única y sinigual!
A las 8 de la noche estábamos ya de regreso en Tela, y después de ducharnos en el hotel, salimos a cenar al nuevo restaurante italiano de Tela: Carmina Street Food. Ahí, mientras disfrutábamos de una excelente comida italiana, acompañados de una rica copa de vino, compartimos nuestra experiencia del tour nocturno en Punta Izopo. Que experiencia inolvidable acabábamos de vivir.
